22.12.06
Contenidos, creadores contra creativos
En los últimos años han aparecido tecnologÃas que permiten a cualquier persona ser propietario de una página web, weblog, foro, comercio… asà poder crear y distribuir contenido audiovisual de calidad. Si unimos los programas de edición de vÃdeo, creación de música, animación, etc., a un equipamiento cada vez más económico (cámaras digitales, PC, móviles…) e Internet, tenemos al alcance los ingredientes necesarios para que cualquiera de nosotros pueda convertirse en un director de cine, cantante o reportero, y llegar a una audiencia de miles de millones de personas interesadas en conocernos más de cerca.
Pero las herramientas son solo una fracción mÃnima con el tipo de contenido o información que se transmite a todos los “internautas†que leen esa información y requiere de una atención especial, talento e, incluso, creatividad. En la red podemos encontrar gran cantidad de información creÃble o no, generada por aficionados, de los cuales solo una mÃnima parte merece la pena prestar atención para el interés que nos ocupe. Por suerte para todos, la red tiene sus recursos para filtrar los contenidos y, en este caso, las comunidades de usuarios y las opiniones de los “internautas†desde otros espacios web hacen que solo aquellas piezas, de este inmenso rompecabezas, puedan interesar e triunfar a lo largo de los años.
Las marcas no solo son afines a estas tendencias y muchas están animando a los consumidores a crear contenidos relacionados con sus productos. De este modo, también los encontramos entre anuncios de televisión, falcas de radio, pancartas o incluso en el diseño de cualquier producto realizados por gente de la misma calle.
El marketing de masas está cada vez más al alcance de todos y cualquiera podrá enviar su opinión personal, como vemos en los periódicos como “cartas al directorâ€. Y esto no es solo es el principio… seguiré viendo como avanza esta tecnologÃa y espero que con los videos volvamos a recuperar esa frase que todo diseñador utiliza en sus obras “una imagen vale más que mil palabrasâ€.
